El Elche cosechó ayer la derrota más dolorosa en lo que va de temporada, no sólo por la inesperada remontada, sino porque el conjunto franjiverde perdió sus señas de identidad durante gran parte del encuentro. Los ilicitanos, que hasta ayer eran el equipo menos goleado de la categoría, dieron una imagen hasta ahora inédita en defensa, con fallos de concentración y muy poca resistencia a las internadas de los atacantes salmantinos. Sin duda, la sesión de video de mañana servirá para detectar esos errores y tratar de buscar soluciones.
Desde el primer minuto, el Elche demostró que no era su día a nivel defensivo. Errores de marca, imprecisiones, entradas a destiempo... un sinfín de errores que pudieron costar caros a los ilicitanos cuando Toti estrelló un balón en el poste en los primeros minutos. Fue el aviso de lo que estaba por venir, ya que minutos más tarde llegaba el primero de la tarde para los charros. Especialmente 'blandas' estuvieron las bandas, ya que las entradas por los costados fueron una constante durante toda la tarde.
No era la tarde de la zaga franjiverde, que volvió a errar e el segundo gol, dejando a Moratón completamente solo para que empujara el balón dentro de las mallas. Y si la actuación de la defensa ya estaba siendo para olvidar, con la sustitución de Acciari el Elche se rompió definitivamente, dando lugar a tres goles más -uno de ellos a balón parado-. El equipo echó demasiado en falta a hombres como Mantecón o Generelo, que estaban sancionados, y el partido se escapó definitivamente con los desacertados cambios del técnico, que esta vez no estuvo fino en las sustituciones.
Jaime tampoco tuvo su tarde
El que tampoco estuvo nada fino fue el guardameta Jaime, que también se mostró impreciso en algunas jugadas. Por ejemplo, una mala salida suya provocó el segundo gol de los salmantinos, obra de Moratón. Tampoco acertó en el cuarto, aunque en esta ocasión podría haber falta del atacante sobre el meta, ya que se encontraba en el área pequeña cuando se produjo la obstrucción. Sin duda, el técnico deberá levantar cuanto antes la moral de los suyos, ya que un triunfo ante el Alcorcón el próximo viernes podría servir de bálsamo para olvidar el partido de ayer.
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