El próximo lunes tendrá lugar una reunión entre los integrantes del Consejo de Administración del Elche C.F., en la que se llevará a cabo una reestructuración del organigrama económico y deportivo de la Entidad. En lo institucional, se espera que Sepulcre sea de nuevo la cabeza visible del Consejo, mientras que Ramírez pasará a un segundo plano, y cederá su poder accionarial a los hermanos Rocamora. En lo deportivo, se espera que Paco Martínez abandone la comisión deportiva del Club, ya que era un hombre de confianza del aún consejero delegado. Jesús de Huertas podría volver un año después de su despido.
El presidente ilicitano confirmó ayer algunos detalles aparecidos en los últimos días en los medios de comunicación, y reconoció que aunque aún no está decidido, "es posible que Juan Carlos Ramírez abandone el día a día en la gestión del Club. Debe tomar una decisión antes del lunes". Sí que quiso negar cualquier cualquier implicación económica del empresario vasco en los traspasos de Wakaso y Willy.
Los hermanos Rocamora serían los encargados de gestionar las acciones de Ramírez, y ganarían mucho peso dentro del Consejo. Antonio Rocamora reconoció que "es una nueva etapa, y a pesar de que se han cometido errores, hay que estar con el Elche". Con la llegada del aval, el Club ha zanjado sus deudas con la mayoría de acreedores a los que le debía dinero, aunque ahora debe cinco millones y medio de euros a Juan Carlos Ramírez por sus aportaciones en estos últimos dos años.
De Huertas podría volver a la dirección deportiva.
El diario INFORMACIÓN ha informado en su edición de hoy que el presidente José Sepulcre baraja la posibilidad de volver a contratar a Jesús de Huertas como director deportivo, en detrimento de Paco Martínez, uno de los hombres de confianza de Ramírez, y que podría salir del Club tras la marcha del vasco.
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